Con la simple utilización de un oscilador en Operator y la fina manipulación de algunos parámetros, nos sumergimos en la creación de un bajo estilo 808, característico de los géneros Hip Hop y Trap. Este proceso nos permite no solo generar un sonido potente y agresivo, sino también personalizarlo según nuestras preferencias, brindando una herramienta versátil para enriquecer y dar forma a nuestras producciones musicales.